“Quiero ir ahí”. Seguramente esta frase la hemos repetido muchos después de ver una película. Y es que el cine nos ha inspirado destinos o nos ha incitado viajes. Y como estamos en verano, momentos de relax y ocio, repasamos algunas pelis para viajeros que levantan pasiones viajeras.
Dubrovnik es una de las escalas estrella en un crucero por las islas griegas y el Adriático. Una joya medieval, escenario de famosas series televisivas, que no defrauda. Pero, ¿qué hacer si llegas en crucero?
Una ruta por un país marcado por la Segunda Guerra Mundial, con ciudades maravillosas como Cracovia y trágicas historias como Auschwitz. Una ruta por Polonia.
A pocos metros de una de las mejores playas de Galicia, con vistas fabulosas y en plena naturaleza, Nidos de Carnota ofrece un capricho exquisito en plena Costa da Morte.
Impresionantes picos nevados. Grandes glaciares. Fauna exótica. Y exuberante vegetación. Es la postal impresionante de un crucero por los Fiordos Chilenos, sólo fiordos.
Salpicados por la Serranía que divide Cádiz y Málaga se encuentran numerosos pueblos con casitas encaladas de blanco. Destinos sorprendentes por su ubicación y su construcción. Recorremos los Pueblos Blancos de Cádiz en una ruta fascinante.
Viajamos a una de las civilizaciones más antiguas del mundo. El país de las pirámides, los faraones y el Nilo. Un país de película como es Egipto. Pero sin crucero.
Juneau es la capital de Alaska. Sólo accesible por barco o hidroavión, es una escala imprescindible en tu crucero por Alaska. Si no sabes qué hacer o cómo hacerlo, te lo contamos.
Viena es una de esas ciudades que tiene algo especial, que te cautiva. Imperial, majestuosa, elegante, con mucha cultura e historia. Una capital para disfrutar.
Al viajar suelen ocurrir muchas aventuras de viaje. Que te caigas de un tren en marcha, tener que hacer una tortilla gigantesca en la India por ser español, o que remolquen tu moto en Tailandia forman parte de nuestro diario de viaje. Pero hay más.