Cruceros fluviales y cruceros marítimos, las diferencias

En el mundo de los cruceros hay dos grandes tipos: los marítimos y los fluviales. La primera diferencia es obvia. Los primeros hacen sus travesías por mar, y los segundos por río. Pero, ¿sólo eso? Veamos las diferencias reales entre los cruceros fluviales y los cruceros marítimos.

Existen varias diferencias entre los cruceros marítimos y los cruceros fluviales. El tamaño de los barcos, los puertos de atraque, los tiempos de escala, el entretenimiento a bordo, el tipo de pasajero, los tipos de restaurantes…y muchas otras. Vamos uno a uno.

Hay una gran diferencia en el tamaño de los barcos de los cruceros marítimos y los fluviales. Los de mar u Océano son mucho más grandes, más lujosos, auténticas ciudades flotantes, con una capacidad para una media de 3000 pasajeros, aunque hay cruceros marítimos de lujo más pequeños y para menos de 1000 personas. Los barcos de los cruceros fluviales son más pequeños, ya que están más limitados por el cauce de los ríos, y suelen ocuparse con unas 200 personas de media.

Esta diferencia de tamaño influye en el tipo de entretenimiento a bordo. Los grandes cruceros marítimos tienen una oferta de ocio a bordo increíble, con actividades que van desde grandes espectáculos hasta muros de escalada, pistas de hielo o surf y parques acuáticos o de karts. La experiencia a bordo es muy importante. Sin embargo, los cruceros fluviales, sin grandes espacios, no tienen casinos, ni ofertan grandes espectáculos, sino más bien pequeños, con actuaciones de artistas locales. Aunque también existen cruceros fluviales con piscinas, spa y actividades básicas de entretenimiento. El ambiente es más familiar, íntimo y personal.

El tipo de destino y el puerto de atraque es otra gran diferencia. Los cruceros fluviales se centran más en los destinos, llegando hasta el centro de las grandes ciudades, algo que no pueden hacer, por su tamaño, los marítimos, que suelen atracar en las afueras. Mientras navegas por el río, puedes estar viendo la ciudad desde el barco.

Además, los cruceros fluviales suelen hacer noche en las ciudades, mientras que los marítimos aprovechan la noche para navegar y llegar al siguiente destino. Hay más tiempo de escala en los fluviales y más tiempo de navegación en los marítimos, de ahí que estos estén diseñados para un mejor entretenimiento dentro del propio barco, como te decía antes. Los cruceros fluviales suelen zarpar por el día, para disfrutar las vistas, con escalas muy próximas entre sí, haciendo más de una al día. Los marítimos sólo hacen una escala diaria.

El tipo de pasajero de los cruceros marítimos y los fluviales es también diferente. Normalmente el viajero de un crucero fluvial suele estar más interesado en el turismo cultural, más tranquilo y menos masificado. Le gusta experimentar el destino, combinándolo con una cata de vinos u otras actividades, no sólo la visita. No busca tanto el entretenimiento a bordo como su intimidad y su descanso. En los cruceros marítimos, el pasajero busca disfrutar del destino pero también del barco, con sus piscinas, casinos y fiestas.

Normalmente, el pasajero fluvial ha pasado antes por los cruceros marítimos. Ya han conocido varios países disfrutando de fiestas a bordo y un ambiente espectacular. Ahora buscan algo más relajado, navegar en barcos más pequeños, con experiencias más íntimas a bordo.

Esto hace también que el tipo de gastronomía y los restaurantes a bordo de los cruceros marítimos y los fluviales sean diferentes. Los grandes barcos de mar suelen ofrecer opciones muy variadas para comer, de todo tipo. Los barcos de río suelen tener uno o dos restaurantes y suelen incluir en sus comidas productos locales que ayuden al pasajero a experimentar la gastronomía y la cultura de ese país.

En realidad, los cruceros fluviales y los marítimos, aunque en esencia son lo mismo, son dos formas muy diferentes de viajar. Los de mar están más limitados en cuanto a recorrido, atracados en la costa, mientras que los fluviales se adentran en los continentes por cualquier río navegable.

En los cruceros marítimos, los destinos más típicos son el Mediterráneo, las islas griegas, el Báltico, los Fiordos Noruegos, el Caribe o Alaska. En los fluviales puedes recorrer ríos como el Rin, el Danubio, el Sena, el Volga, el Mekong, el Misisipi o el Duero.

Diferencias entre cruceros fluviales y cruceros marítimos. Así son. Pero si te han quedado dudas o tienes cualquier otra pregunta, escríbenos a info@consejerosviajeros.com o deja tus comentarios a continuación.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

I accept that my given data and my IP address is sent to a server in the USA only for the purpose of spam prevention through the Akismet program.More information on Akismet and GDPR.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.